MODALIDADES
Dentro de la caza
existe una gran variedad de modalidades, según las especies que se cacen y
según el modo en que esto se haga. Así, podemos diferenciar principalmente
entre caza menor y caza mayor, siendo la menor la destinada a la caza de
animales tales como zorros, conejos, liebres, perdices, palomas, codornices,
faisanes, becadas, patos, etc; Y la mayor es aquélla en que las piezas a abatir
son jabalíes, ciervos (o venados), lobos, corzos, gamos, muflones, rebecos,
cabras monteses y otros animales de mayor tamaño.
Caza al acecho:
La caza a rececho es una modalidad de caza que se practica en todo el mundo.
Consiste en la búsqueda de un animal seleccionado por su trofeo, o simplemente
la búsqueda de un animal para darle caza, efectuando luego un acercamiento
sigiloso a la misma para darle muerte. Se practica a pie
e intervienen un único cazador y un guarda que supervisa la cacería, siendo
necesario en muchos casos la presencia de algún auxiliar para el transporte de
los animales.
Resulta fundamental el conocimiento del terreno, las querencias
de los animales, su abundancia y localización, función desarrollada por el
guarda, por lo que su compañía no se limita únicamente a labores de vigilancia
y control, sino que resulta imprescindible para obtener éxito en la cacería.
Otro aspecto básico es la utilización de una buena óptica, tanto para la
localización de la pieza (prismáticos, catalejo, telescopio terrestre) como
para efectuar el disparo (rifles dotados de mira telescópica), dado que éstos
suelen efectuarse de forma general a distancias relativamente grandes. Una vez
localizada la pieza, se realiza la aproximación con el viento a favor, para
evitar ser detectado. El lance se efectúa cuando se está a una distancia
adecuada de tiro.
Caza de montería:
La caza de montería es una modalidad de caza mayor cuyo origen se pierde en el tiempo. En ella tienen un especialísimo protagonismo los perros de caza, ya que sin ellos sería imposible llevarla a cabo. Han existido y existen diferentes tipos de montería según el territorio donde se lleva a cabo, la manera de entender la caza y la utilización de unas u otras razas de perros.
Caza de ojeo:
El
ojeo es una forma de caza menor que principalmente se usa para la caza de la
perdiz.En ella, se ponen unos puestos de cazadores al final de una extensa
zona, y en el otro extremo se ponen los ojeadores, que son unas personas
provistas de pañuelos, palos, etc. para hacer ruido y asustar a los animales.
Con el sonido de
una corneta comienzan a ir en dirección a los puestos de cazadores, a la vez
que van haciendo salir a las perdices que se dirigen volando en dirección
contraria. Así, los cazadores solo tienen que estar atentos a cuándo pasan los
animales para abatirlos. El ojeo se da por concluido cuando se juntan ojeadores
y cazadores. Se suele hacer un recuento de las piezas abatidas para que los
propietarios del coto puedan hacer un control cinegético de las especies. Los cazadores en
sus puestos suelen esconderse tras un parapeto de caza para no ser vistos;
suelen ir acompañados de una persona que se encarga de recargar la escopeta
(normalmente llevan dos) así como de recoger las piezas abatidas una vez
concluido el ojeo.
Este tipo de caza
se realiza en grandes terrenos, principalmente privados y gestionados por
particulares. Este modelo solo se puede realizar un par de veces en cada
terreno pues si no acabaría con la especie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario